Ante todo, debemos escoger un calzado cómodo para trabajar, debe ser un calzado de seguridad cómodo.
Podemos definir el calzado de trabajo como el calzado que es utilizado en el desempeño de una actividad laboral, que incorpora elementos para proteger al trabajador de riesgos que pueden desembocar en accidentes. Este tipo de calzado de seguridad está regulado por las disposiciones normativas de cada país.
Según el nivel de protección ofrecido, el calzado de seguridad puede clasificarse en las siguientes categorías:
- Calzado de seguridad: es un calzado de uso profesional que proporciona protección en la parte de los dedos, mediante la incorporación de elementos de protección destinados a proteger al trabajador de las lesiones que pudieran provocar los accidentes en aquellos sectores de trabajo para los que el calzado ha sido concebido, y que está equipado con puntera de seguridad, diseñado para ofrecer protección contra el impacto cuando se ensaya con un nivel de energía de, al menos, 200 J y contra la compresión cuando se ensaya con una carga de al menos 15 KN. (norma UNE-EN ISO EN20345:2011)
- Calzado de protección: es un calzado de seguridad que brinda protección en la parte de los dedos. Incorpora puntera de seguridad que garantiza una protección suficiente frente al impacto, con una energía equivalente de 100 J en el momento del choque, y frente a la compresión estática bajo una carga de 10 KN. (norma UNE-EN ISO 20346:2005)
- Calzado de trabajo: es un calzado que incorpora elementos de protección para proteger al usuario de los posibles riesgos que pudieran ocasionar accidentes. No garantiza protección contra el impacto y la compresión en la parte delantera del pie. (norma UNE-EN ISO EN20347:2012)
A su vez, se distinguen 2 clases:
* clase I: calzado fabricado en cuero y otros materiales.
* clase II: calzado completamente moldeado o vulcanizado (caucho, PVC)
Una vez definidos los 3 tipos de calzado y sus materiales, escogeremos nuestro calzado en función del nivel de protección que vayamos a necesitar. Deberemos cerciorarnos que los zapatos de seguridad son los adecuados para el tipo de trabajo al que serán sometidos según los riesgos de nuestra área de trabajo. Una mala elección incrementará el riesgo a sufrir lesiones y reducirá la vida útil de nuestro calzado por un uso inapropiado.
Aparte del obligatorio marcado “CE”, el calzado de seguridad deberá llevar marcado de manera clara e indeleble: la talla, la marca o identificación del fabricante, el nombre o referencia del modelo, la fecha de fabricación, el número de la norma armonizada aplicada para la evaluación de su conformidad con las exigencias de salud y seguridad; sin olvidarnos de una explicación de las marcas, detallada y clara, donde se expliquen los rendimientos ofrecidos por el calzado en su tarea protectora frente a los diferentes riesgos, que debe estar incluida en el folleto informativo de obligado suministro por parte del fabricante.
Antes, las únicas consideraciones a tener en cuenta eran la seguridad y la durabilidad del calzado, pero ahora también se tiene en cuenta la comodidad del trabajador y se buscan cualidades como ligereza, comodidad e incluso que tengan un diseño atractivo; sobre todo en el calzado de trabajo para mujer. Ante todo, debemos escoger un calzado cómodo para trabajar, debe ser un calzado de seguridad cómodo.
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